L’Homme de Yves Saint Laurent: sutil frescura masculina

L’Homme de Yves Saint Laurent es un perfume fresco de corte clásico. Está destinado a ser un perfume indispensable en el armario de muchos hombres que quieren usar un perfume elegante pero despretencioso, fresco a la vez que algo delicado. Su discreta propuesta olfativa lo hace perfecto para muchas ocasiones en las que queremos sentirnos bien sin llamar demasiado la atención.

L´Homme de Yves Saint Laurent

En este perfume masculino el acento recae en su faceta amaderada, que junto con las hojas de violeta y la bergamota cobrarán todo el protagonismo de la fragancia.

De entre los muchos perfumes que la casa de Yves Saint Laurent ha estrenado desde su “Y” de 1964, L’Homme es un perfume del 2006 cuyo título nos evoca masculinidad y un aire sobrio en la línea de otras fragancias como Dior Homme con el que algunos lo confunden. Aunque los dos han conseguido muy buenas ventas, lo cierto es que L’Homme ha obtenido críticas menos positivas dentro de lo que son las expectativas para una firma del prestigio de Yves Saint Laurent.

La fragancia recurre a notas bien consolidadas en la perfumería masculina actual como la bergamota, la violeta o la madera de cedro mientras que pasa de puntillas sobre otros ingredientes con personalidad más difícil: jengibre y albahaca, que se listan en la composición.

L’Homme es una creación de tres famosos perfumistas: Anne Flipo (una de sus últimas creaciones para hombres es Invictus de Paco Rabanne), Pierre Wargnye, responsable del mítico Drakkar Noir de Guy Laroche, y por último Dominique Ropion, más conocido en trabajos femeninos como Amor Amor de Cacharel o Pure Poison de Dior.

Según la página de Yves Saint Laurent, L’Homme es un perfume para un hombre urbano que equilibra fuerza con sofisticación e industria con lujo. Podemos ver esa lucha de opuestos en un frasco que resulta algo tosco y “bruto”, pero que guarda la delicadeza del perfume en su interior.

¿Cómo huele L’Homme de Yves Saint Laurent?

En las notas de salida, la frescura parte de la bergamota y la lima. Dando al perfume un carácter cítrico, al que se suma con fuerza picante el jengibre, y un poco de calone para darle la nota de ozono característica.

Las especias se multiplican más adelante con el protagonismo de la pimienta blanca, aunque no reparamos mucho ni en ella ni en la albahaca por el uso predominante de hojas de violeta que nos ofrecen una impresión floral masculina.

En su última etapa, el perfume recurre a maderas de cedro y sándalo, al vetiver de Tahití, al ámbar y al haba tonka para dotarlo de cierta dulzura y calidez.

Una de las sensaciones habituales de quienes prueban L’Homme, es que resulta genérico pero agradable. Su estilo es de diario y para oficina, y tiende a resultar más llevadero en verano aunque se puede usar durante todo el año.

El frasco

El frasco es rocambolescamente sencillo. Su tapón sobredimensionado, con forma de perno hexagonal y con las iniciales de Yves Saint Laurent grabadas destaca visualmente. Recordando cierta inspiración industrial de la Bauhaus alemana con un toque Art Déco.

El frasco es un cuerpo cilíndrico de vidrio transparente con una base gruesa y a través del que se ve un color amarillo muy suave.

L’Homme está disponible en tamaños de 40, 60 y 100 ml. en formato de eau de toilette.

Hay una gama de productos de aseo disponibles: desodorante en stick y en spray, gel de ducha, loción y bálsamo after shave.

Versiones

Recientemente ha lanzado L´Homme Ultime con una propuesta renovada que interesará a muchos. Anteriormente, en 2013, la versión en formato eau de parfum llamada L’Homme Parfum Intense, con el mismo frasco pero un líquido de color más oscuro.

En su composición se introducen notas de aceite esencial de davana, y se da más protagonismo al ámbar entre las notas de fondo.

Para los nostálgicos del jengibre, existe una versión de 2011 que sigue disponible llamada L’Homme Cologne Gingembre, reinterpretación que hace hincapié en esta nota especiada.

De entre las ediciones limitadas destacan las versiones veraniegas de 2007 y 2008, y una edición con diseño del frasco del arquitecto Jean Nouvel.

Los flankers principales de L’Homme son tres eaux de toilette con diferentes personalidades que han desarrollado su propia gama paralela:

La Nuit de l’Homme de 2009 se apoya en notas de cardamomo, cedro y cumarina, un compuesto de olor dulce que se encuentra en el haba tonka. El frasco adquiere tonalidades ahumadas para indicar un uso nocturno.

L’Homme Libre (2011) utiliza anís estrellado, nuez moscada, pimienta rosa y notas de cuero. El packaging es de colores aéreos, entre transparente y azulado.

L’Homme Sport (2014) en la línea de las fragancias energéticas utiliza una salida de aldehídos, las propiedades de la esencia de elemí, el cardamomo y el cedro, además de una nota sensual gracias al compuesto “amberXtreme”.

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Desde su lanzamiento en 2006 el modelo que encarna L’Homme es el francés Olivier Martinez, quien ha protagonizado ya varias campañas del perfume. Sus facciones viriles y su mirada intensa son probablemente algunas de las razones por las que le eligieron para representar una fragancia que se define a sí misma como sensual y magnética.

En el último anuncio de televisión Fabien Baron dirige un juego de miradas indiscretas y atracción entre una chica y nuestro protagonista.

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